En el próximo Pleno Municipal se aprobarán los Presupuestos para 2020. Para el PSOE de Boadilla del Monte el ahorro en partidas de publicidad, propaganda y gastos de representación ascendería a 569.000 euros que nos permitiría abordar los problemas reales de los vecinos y vecinas de nuestro municipio.
Los presupuestos de un Ayuntamiento son la herramienta más importante para dar respuestas a las necesidades básicas de los vecinos y vecinas.
El gobierno municipal nos entrega a la oposición el Proyecto de Presupuestos sólo unos días antes de que éstos vayan a la Comisión Informativa de Hacienda, sin tiempo para poder estudiarlos y trabajarlos ya que es un documento muy extenso. Esto impide que los grupos de la oposición podamos analizarlos y presentar enmiendas.
No solo no nos da tiempo a nosotros, sino que sigue sin abrir una puerta a la participación de los vecinos y vecinas de Boadilla, a las asociaciones de empresarios y comerciantes, ni a ninguna asociación de Boadilla.
Ante esta realidad, el Grupo Socialista, después de hacer un trabajo riguroso e intenso en estos pocos días, analizando y estudiando el proyecto de presupuestos, hemos comprobado que, a pesar de que votaran en contra a nuestras enmiendas presentadas el año pasado, han desarrollado a lo largo de este año muchas de nuestras propuestas.
569.000 euros de estos presupuestos, se van en gasto de protocolo y publicidad, que una vez más, nos demuestra la pasión por la publicidad de este Equipo de Gobierno.
El ahorro en partidas de publicidad, propaganda y gastos de representación, junto a la mejora de la eficacia en la gestión y sobre todo dejar de financiar a otras administraciones públicas, nos permitiría un mayor ahorro y abordar los problemas reales de los vecinos y vecinas de nuestro municipio, como los servicios sociales, el urbanismo y la cultura sin subir los impuestos a los ciudadanos, ya que se pagarían con los fondos que se dedican a la excesiva publicidad, propaganda y protocolo y suprimiendo algunas externalizaciones. Una vez más, la falta de unos presupuestos participativos, dejan fuera la posibilidad de añadir las propuestas que algunos de nuestros vecinos propondrían para la mejora del municipio.